Camarero de Asturias cancela 14.000 € en menos de cuatro meses

Hasta qué punto nos influye la suerte

Hay quien opina que las personas a las que les va muy bien en la vida se debe, en parte al menos, a que tienen buena suerte. A que han llegado al éxito ayudadas por el azar. En el otro extremo, están quienes creen que la suerte no existe ni para bien ni para mal y que todo es consecuencia de las decisiones que se adoptan y las acciones que se llevan a cabo.

Y entre ambas posturas existe otra intermedia que defiende que si bien son nuestras actuaciones las que determinan el futuro también hay un pequeño componente de suerte  que, en algunas ocasiones, puede afectar en mayor o menor medida al resultado. En el caso que nos ocupa, la mayoría pensará que Óscar realmente ha tenido mala suerte.

Y es que este asturiano trabajador de la hotelería llevaba mucho tiempo queriendo tener su propio negocio, pero las circunstancias no eran las adecuadas. Los motivos económicos, unas veces, y  la coyuntura familiar, otras, le impedían dar el paso. Hasta que llegó un momento en que surgió una buena oportunidad, su situación era la ideal y a sus 52 años se decidió a emprender como dueño de su propio bar.

Fue en enero de 2020. Lo siguiente ya te lo puedes imaginar: en febrero empezó el confinamiento y el cierre de todos los establecimientos. Y aunque al cabo de unos meses se volvió a abrir, la afluencia de público era muy poca, más aún para un negocio que solo había estado abierto un mes y al que no le había dado tiempo a hacerse de una clientela.

El resultado no fue nada extraño: en noviembre Óscar cerró definitivamente el negocio con una deuda de 14.000 euros.

Importe mínimo de deuda para optar a la Ley de Segunda Oportunidad

Los requisitos para poder iniciar el procedimiento regulado en la Ley de Segunda Oportunidad son, básicamente: ser persona física, tener dos o más acreedores y demostrar tanto que se es insolvente como que no se ha llegado a esa situación actuando de mala fé.

Nada dice la norma sobre que las deudas deben alcanzar un importe mínimo, por lo que el hecho de que lo que se deba sea una cantidad pequeña no impide que se pueda obtener la exoneración si se cumplen las condiciones necesarias.

Ahora bien, estamos ante un proceso judicial que requiere la asistencia de abogado y procurador por lo que es necesario pagar los honorarios de estos profesionales. Esto hace que no interese acudir al Juzgado cuando se debe 500 euros, por ejemplo, porque el coste va a ser superior al beneficio obtenido.

La deuda de Óscar era de 14.000 euros, un importe que para algunas personas puede ser pequeño, pero que él no podía pagar con sus ingresos. Por eso la solución prevista en la Ley de Segunda Oportunidad era ideal.

Cómo iniciar los trámites

Con Libertad Sin Deudas el proceso es muy cómodo, sencillo y rápido. Todo comienza con una simple llamada de teléfono en la que te informamos de todo lo que necesitas saber sobre el procedimiento y resolvemos las dudas que nos plantees.

Si estás interesado, te proporcionamos una reunión gratuita y sin compromiso con uno de nuestros abogados especializados en la que podrás tratar los detalles concretos de tu caso y tener una idea muy clara de las posibilidades de éxito. Y, a partir de ahí, eres tú el que decide si se inician los trámites judiciales o no.

Óscar así lo hizo y no puede estar más contento porque en febrero de 2024, y en menos de cuatro meses, consiguió la cancelación definitiva del total de su deuda que, como hemos dicho, ascendía a 14.000 euros.  Solo se arrepiente de una cosa: de no haber dado el paso antes.

Auto de cancelación de deuda

Clicando en el siguiente enlace puede consultarse el auto de cancelación de deuda correspondiente a este caso. Los datos de las personas implicadas han sido borrados por motivos de privacidad: Camarero de Asturias consigue el perdón de 14.000 euros en menos de cuatro meses