Cancelados 17.000 euros a dependienta de Las Palmas en cuatro meses
Muchas deudas pero de pequeño importe
Beatriz está casada y tiene dos hijos. Cuando contactó con nosotros, trabajaba en una tienda desde hacía unos meses, pero hasta ese momento su trayectoria laboral había dejado mucho que desear. Sin una profesión específica, fue encadenando unos trabajos con otros pero la mayoría de ellos mal pagados, con jornadas a tiempo parcial y contratos de poca duración.
La situación económica de una persona con el nivel de ingresos que se deriva de lo anterior es, como es obvio, bastante precaria. Y cuando se va tan justo de dinero y se presenta un gasto extraordinario con el que no se ha contado es fácil elegir soluciones que parecen acertadas pero que no lo son tanto.
Beatriz cometió varios errores en este sentido. El primero de ellos fue solicitar un pequeño préstamo creyendo que como la cuota de devolución era baja la iba a poder pagar sin problema. Pero como no fue así, llegó la siguiente mala decisión: volver a endeudarse para pagar ese crédito.
Repitió la operación en más ocasiones hasta que en un momento dado se encontró con diferentes deudas de pequeño importe pero que, al sumarlas, le suponía hacer frente a una serie de pagos a los que no podía llegar.
¿Cualquiera puede optar al proceso regulado en la Ley de la Segunda Oportunidad?
No. Este es un procedimiento pensado solo para personas físicas, con independencia de si trabajan por cuenta ajena, tienen negocio propio o están en situación de desempleo, lo cual deja fuera a las sociedades (limitadas o anónimas) y a todas las demás entidades que tengan personalidad jurídica propia.
Además es necesario que se tengan dos o más acreedores y que se demuestre tanto que se es insolvente (esto es, que no se tienen bienes suficientes para hacer frente al pago de las deudas) como que no se ha llegado a esa situación actuando de mala fe.
Son muchos los ciudadanos que se encuentran en una situación así, que necesitan una solución que les permita dejar atrás la losa que les supone todo lo que deben y no van a poder pagar. Entre ellos, estaba Beatriz.
Cómo iniciar el procedimiento
Para comenzar la vía contemplada en la Ley de Segunda Oportunidad se necesita la asistencia de abogado y procurador. Ellos te representarán ante el Juzgado y se encargarán de todo el proceso. Ahora bien, como es lógico, mientras mejores sean los profesionales que contrates mayores serán tus posibilidades de conseguir el mejor resultado.
En este sentido sí que Beatriz lo hizo muy bien, porque empezó llamando a Libertad Sin Deudas. Contactar con nosotros le sirvió para conseguir toda la información necesaria y tener la tranquilidad de que estaba en buenas manos.
El segundo paso fue tener una reunión gratuita y sin compromiso con uno de nuestros abogados, en la que hablaron de los detalles concretos de su caso, de las posibilidades reales de éxito que había, de los compromisos que el despacho asumiría y de los honorarios exactos y completos.
Cuando vio que la probabilidad de obtener el perdón de las deudas estaba más que a su favor lo tuvo claro, así que a finales de octubre de 2023 se presentó la documentación en el Juzgado y en 4 meses había conseguido lo que deseaba: dejar atrás la totalidad de su deuda, que ascendía a 17.000 euros.
Auto de cancelación de deuda
Clicando en el siguiente enlace puede consultarse el auto de cancelación de deuda correspondiente a este caso. Los datos de las personas implicadas han sido borrados por motivos de privacidad: Cancelados 17.000 euros a dependienta de Las Palmas en cuatro meses