El Juzgado Mercantil de Alicante perdona una deuda de 50.000 euros a un joven de 28 años afincado en la ciudad
Préstamos para sacar adelante un negocio familiar
La situación del cliente era realmente complicada, pues con tan solo 28 años arrastraba una deuda de 50.000 euros, si bien sus únicos ingresos consistían en una prestación contributiva por desempleo de 510 euros mensuales.
Esa cantidad procedía de préstamos personales y créditos financieros, más una pequeña deuda pública contraída con el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife. R.S. se mudó a Alicante en el año 2017 y este fue el momento a partir del cual se empezó a desencadenar la situación que terminó en insolvencia.
El grueso de la masa pasiva (deudas) de R. S. proviene de un préstamo personal variable otorgado en el año 2015 a favor del deudor y sus abuelos, actualmente fallecidos. Fue solicitado para cubrir las necesidades de compra de mercancía para el negocio familiar. A pesar de la inyección económica, el negocio no obtuvo sus frutos y su cierre desencadenó la imposibilidad de satisfacer el crédito solicitado.
Este escenario, unido a su situación de desempleo, deriva en una grave insolvencia económica, que es el motivo por el que contacta con Libertad Sin Deudas.
Exoneración total de la deuda privada
Una vez comprobado que reunía los requisitos exigibles por la Ley de Segunda Oportunidad, se inició el procedimiento en el Juzgado de lo Mercantil número 1 de Alicante.
Nuria García Sempere solicitó para su cliente un concurso sin masa, ya que R.S. carece de bienes embargables. Esta modalidad no requiere intentar un plan de pagos, según se prevé en el art. 501.1 TRLC, lo que agiliza y abarata los costes. Si bien R.S. tenía dos vehículos a su nombre, su valor era inferior al coste del procedimiento.
El magistrado estudió el caso y decidió conceder el Beneficio de Exoneración del Pasivo Insatisfecho (BEPI) del 100% de la deuda privada. La deuda pública, contraída con el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife, no es exonerable, por lo que no quedó cancelada. Aun así, su importe era de 1.750 euros, una cantidad muy pequeña en comparación con el total.
El procedimiento se inició en noviembre de 2022 y se resolvió en junio de 2023. Siete meses pueden parecer poco, pero en algunos casos la exoneración se consigue en menos tiempo. Hay que tener en cuenta que el periodo comprendido entre el 24 de diciembre y el 6 de enero es inhábil a efectos procesales. Además, debemos sumar la huelga de letrados de la Administración de Justicia, que tuvo lugar desde enero hasta mediados de marzo, aproximadamente, lo cual hizo que, en este caso en concreto, el concurso sufriera más demora que en otros procedimientos similares.
Auto de cancelación de deuda
Clicando en el siguiente enlace puede consultarse el auto de cancelación de deuda correspondiente a este caso. Los datos de las personas implicadas han sido borrados por motivos de privacidad: Auto del juez: El Juzgado Mercantil de Alicante perdona una deuda de 50.000 euros a un joven de 28 años afincado en la ciudad.